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“Es bueno poder jugar en un club nuevo y grande como éste”

Así lo expresó Nicolás Casola, en relación a su arribo a El Linqueño. El punta, de tan sólo 21 años de edad, le otorgó una entrevista a “Corazón Amateur” en la que habló de sus expectativas para este Regional 2020, de lo que ha observado en sus nuevos compañeros en relación a las virtudes de juego y respecto a por qué ha decidido venir al elenco albiazul, entre otros temas.

Es interesante ver a los nuevos jugadores que llegan a los equipos de Lincoln para afrontar el Regional 2020 en la cancha, aunque también es distintivo conocerlos en sus conceptos en relación o cómo viven, ven y sienten el fútbol, además de las expectativas que tienen al llegar a una nueva entidad deportiva.

En ese marco, “Corazón Amateur” ya ha evidenciado el testimonio de César Susmel, uno de los refuerzos de Rivadavia, y de Germán Mayenfisch. Ahora, el turno es de Nicolás Casola, uno de los últimos en arribar a El Linqueño, un joven delantero de 21 años que ha llegado desde San Martín de Tucumán, de haber hecho las inferiores completas en esa entidad, sumado a un último paso por San Jorge.

Entre sus cualidades, se destacan la velocidad y el vértigo que propone a la hora de jugar por afuera, por las bandas, para lastimar desde ese sector y proponer peligro en las áreas, un trabajo que en el CAEL lo hacen muy bien Mauricio Pavón Zárate y, en ocasiones, Hugo el “mago” Palmerola, cuando decide tirarse a los costados para desbordar.

En ese sentido, Nicolás podría aportarle al equipo ese desequilibrio que es tan importante para un equipo cuando no se pueden romper líneas defensivas por adentro, por la zona central del ataque.

A continuación, “Corazón Amateur” te propone la mirada de este nuevo jugador linqueñista, que tendrá la posibilidad de mostrar sus virtudes en un torneo Regional Amateur que, en su primera fase, ha arrojado para el “León” una zona dura, compuesta por Rivadavia de Lincoln y Argentino y Juventud de Pergamino.

1- ¿Por qué decidiste venir a El Linqueño? ¿Cómo se dio tu llegada al club?

– Me decidí a venir aquí porque me habían contado que era un muy lindo club y quería conocerlo. De todos modos, el tema del arribo fue muy rápido. Me llamaron para venir y al otro día ya estaba viajando.

2- ¿Cómo viste al plantel desde que llegaste al CAEL, en relación a lo humano y anímico?

– La verdad, se nota que es un buen grupo, formado por muy buenas personas.

3- ¿Qué cualidades encontraste en el plantel en relación a su perfil de juego? ¿Creés que CAEL está para ascender?

– Lo que pude ver de este plantel es que utilizan mucho el espacio vacío que queda en la cancha y que son muy directos. En relación a si pienso que el CAEL está para ascender, creo que sí. En ese sentido, ojalá se dé todo como lo esperamos.

4- ¿Cómo estás físicamente para afrontar el Regional?

– Estoy intentando ponerme al cien por ciento lo antes posible para poder aportarle todo lo que pueda al equipo.

5- ¿Qué opinión te merece el hecho de que en el primer partido del certamen tengan que enfrentar a Rivadavia? ¿Pudiste conocer algo de este equipo que es el rival histórico de El Linqueño?

– La verdad es bueno poder jugar en un club nuevo y grande como éste. En relación a Rivadavia, se nota que será un buen partido y siempre es lindo empezar así, con este tipo de encuentros, debido a que tenés que estar concentrado y darlo todo. De todos modos, mucho no conozco del rival, sólo lo que comentan mis compañeros, pero, bueno, es un clásico, y los clásicos siempre son duros.

6- ¿Qué te parece la zona que les ha tocado?

– Es una zona difícil, pero si queremos llegar a cumplir el objetivo del ascenso, tenemos que ganarles a todos.

7- ¿Qué podés contarle a la gente de El Linqueño respecto a tu perfil futbolístico, a tus características de juego?

– Me gusta mucho jugar por la banda, llegar hasta el fondo y tirar los centros o diagonales.

8- Por último, ¿qué te ha dejado tu paso por los equipos de San Jorge y San Martín de Tucumán, donde hiciste toda tu formación?

– Por San Jorge, que fue el último año en donde estuve antes de venir aquí, me fue bien porque me sentía importante en el equipo y mucha confianza de mis compañeros. Y, en relación a San Martín, pasé once años en ese club, que es mi vida, donde viví todo lo hermoso que te puede dar el fútbol. No dudaría ni un minuto en volver.

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