Nueva sección “inéditos linqueños”: Larroca, Fonda, Arcos, en la primera entrega

Sin dudas, la literatura linqueña tiene mucho para decir. Con estilo para todos los gustos, esta parte del arte local es una de las más habitadas. Y son jóvenes y adultos quienes nunca dejan al azar este soporte, riquísimo para aumentar el grado de crítica y percepción ante la realidad y ante uno mismo.

En ese contexto, conociendo este punto y a viarios de nuestros escritores y escritoras locales, es que “Corazón Amateur” se ha puesto en la grata labor de conseguir trabajos inéditos de nuestro autores y autoras, con el objetivo de propagar paulatinamente esos trabajos que aún no tienen soporte para que aquí puedan hallarlo, marco en el que, de a poco, se podrán conocer a nuestros autores y autoras, y, con ellos, sus creaciones, formas, estilos, puntos de vista, peculiares apreciaciones interiores y exteriores que siempre arrojan buenos resultados para el movimiento de las emociones y para el aumento de la crítica sobre lo que es la vida en general. Además, también se dará espacio a las invenciones que ya han salido en algún ejemplar o en otros soportes, para no dejar de lado lo importante y ya hecho en nuestro medio.

También entrarán aquí las letras musicales, otra forma de escritura que en Lincoln ha dado mucho y que aún tiene mucho para ofrecer. Letras de todos los tiempos publicaremos aquí. Del presente y del pasado.

En relación a la escritura, en general tiene una veta lírica y de concepción especial, con la utilización de un soporte que es el de la palabra, campo de batalla o de introspección en donde siempre surgen cosas interesantes para decir, para nombrar, para renombrar de otro modo.

En ese contexto, en esta primera entrega de lo inédito, “Corazón Amateur” propone la poesía de una joven multifacética artista, “Conty” Arcos, quien, además de moverse en la música el teatro y el periodismo con sagacidad, claridad y estilo propio, también lo hace en la poesía, un camino que viene recorriendo hace algunos años y que alberga varios trabajos escondidos, todos seductores, por supuesto, como cada cosa que se propone hacer esta joven talentosa.

También damos a conocer poemas de dos grandes de nuestra literatura, ya con libros publicados y con un largo rodaje y estilos asimilados inconfundibles. Ellos son Ludovico Fonda y José Luis Larroca, amigos y retroalimentados en su vida personal y en su trazo de poesía, un condimento que le pone aún más fulgor a este entramado de talentos que andan juntos desde pequeños.

En relación a las poesías ya publicadas, en esta ocasión evidenciamos un poema de Agustín Luisi, otro de María Elvira Aristimuño y uno más de Nadia Crantosqui, todos ellos y ellas con una trama especial en sus formas de crear contenido artístico.

Y, en las letras melódicas, una de Aníbal el Canníbal y otra de la nueva banda Bolsoespejo son las que abren esta nueva sección pensada para la visualización de nuestro arte local.

POEMAS INÉDITOS LIQUEÑOS

JOSÉ LUIS LARROCA

PROMESA

No estoy hoy donde mi cuerpo, ni en la lejanía de sueños de otro tiempo.

Veo mis manos desde arriba, mientras escucho un tren partir en algún sitio. Imagino, a lo lejos, este adiós de pañuelos en silencio.

Soy distancia detenida en la quietud del que se piensa en otros cielos,

una perpleja encrucijada de camino y horizonte.

Hoy no estoy aquí y una extraña melancólica alegría sonríe en mi rostro.

Mis ojos viendo las ventanas de otro día,

donde la luna baila y baila por las noches, y el sol es un lento caracol de fuego y tierra cruzando lentamente la mirada de la tarde y esos ojos que me ven y me saludan

(allí donde no estoy).

La vida (nos) promete un delicioso sortilegio.

“CONTY” ARCOS

TIEMPO EN CARÁTULA

Carátula de amor,

carátula de odio,

carátula de otoño,

carátula de tiempo,

oculto ante cualquier ser,

desmembrándose,

desprendiéndose…

Cualquier cosa haría para volver,

ante cualquier cosa.

LUDOVICO FONDA

DESCANSAR

El agua y

su blandura

que sabe horadar

la piedra más apretada,

enseñan que el destino

es agua

y las certezas piedras.

Nosotros: entonces:

piedras de agua.

Esperando el veredicto del sol.

Sin olvidar que:

todos los cadáveres, alguna vez,

vinieron a ser.

Y fueron.

Entre ellos hay un par a los que extraño

hasta el insomnio.

Por suerte.

POEMAS YA PUBLICADOS EN LA EDITORIAL LOCAL “DIARIO DEL DESIERTO”

MARÍA ELVIRA ARISTIMUÑO (DEL LIBRO “APUNTES DE OTROS CIELOS”)

Enciendo velas, puntos de luz en el espacio; contornos suaves suben por las cosas.

Medito con la naturalidad dorada del fuego. Ahora la energía es otra, más apacible, sanadora… Alguien visionó que meditar y medicina tienen la misma raíz, del latín, curar, sanar.

Todas las respuestas están en nosotres. Buceando en los adentros podemos encontrarlas; tenemos la sabiduría allí. La voz interna que guía hacia lo verdadero nos muestra el camino a seguir, sólo tenemos que aprender a escucharnos.

Meditando tiendo un puente hacia la divinidad que existe en mí.

Profunda relación con la vibración que nos contiene, vamos, así, respirando la vida. Si hacemos silencio, aquietamos el discurrir mental, y en esas aguas tranquilas y transparentes aparece aquello que necesitamos sentir, saber… Hago silencio y alrededor para poder escucharme.

AGUSTÍN LUISI (DEL LIBRO “LA CASA DE TOTI”)

Con un horizonte

Ya se crea…

Cuidado con qué molde…

NADIA CRANTOSQUI (DEL LIBRO “FRECAFEST”, EDITORIAL “PECES DE CIUDAD”)

ENCARGO

que no se vaya

el hervor de poseer

esta plaza esta sed las

cosas.

que tu beso no se coma

la escarcha negra

que como todo frío

es clave.

que no me olvide nunca

del animal

con pelo de sauce eléctrico

que me ocupa.

y que me escribas tu nombre

me hace la boca agua

que me escribas.

LETRAS MELÓDICAS LINQUEÑAS

CORAJITO (LETRA DE LA BANDA ANÍBAL EL CANNÍBAL)
Sos tan duro con tu hueso,
tan pelado, tan capaz.
Hijo del séptimo infierno
y sin castrar.
Sos del tipo ropa fina
corajito anfetamina
que no piensa parar.
 
Sos la alma de la fiesta,
tan privado, tan sagaz.
Mensajero de esos sueños
para olvidar.
Pescadito de pecera
verdugo de cabecera
que no piensa parar.
 
¿Cuánto vale tu quesera?
¿Cuánto vale tu animal?
¿Cuánto valen tus traiciones?
¿Y tu cantar?
Pastor de ovejas flacas,
caramelo de sanata
que no piensa parar.
 
Sos un tipo tan moderno,
tan dechado, tan cordial.
Mercader de ilusiones
del más acá.
Mentiroso patas cortas,
muñequito de la torta
que no piensa parar.

MANTO NEGRO (LETRA DE LA BANDA BOLSOESPEJO)

Tiempos de paz, hay tiempos de paz,

Valor, valor, yo te invoco hasta acá.

La ilusión, la atracción.

Siembro en la tierra esquejes de

Hierba y reposo.

Manto negro no me vas a tapar.

Manto negro te libero.

No sé qué saldrá si empiezo a empujar.

Varón, varón, hablan desde el salón.

La pasión, la canción.