Con jugadores del club y algunas incorporaciones, Funes empieza a poner su sello en Rivadavia

Rivadavia de Lincoln, en el orden futbolístico, ha empezado una nueva etapa en la dirección técnica. Tras la salida de Juan Carlos Gho hace poco más de un mes y a la incorporación en este puesto de Diego Funes, este último ha empezado a trabajar con un plantel que ha sufrido bajas, que ha podido sostener algunos de sus jugadores y que ha incorporado a siete más, teniendo en cuenta también que este instructor ha tomado como opción la de subir algunos deportistas de categorías menores del Albirrojo a la máxima división.

En ese orden, con estos contrapuntos, el joven instructor ya lleva algunas semanas de entrenamiento en su nuevo club, espacio de tiempo en el que ha empezado a conocer a los futbolistas que son del Rojo y a probar en cancha, en los entrenamientos y en algunos amistosos, a los que ha sumado, mayormente juveniles provenientes de Agropecuario de Carlos Casares, en donde había sido entrenador, un punto a tener en cuenta a la hora de entender el porqué de estas nuevas incorporaciones a su plantilla.

En ese contexto, en esta misma línea, los nuevos deportistas que han llegado al club y varios de los que ya estaban, han trabajado en estas últimas semanas con la idea del entrenador de ir encontrando un equipo ideal para el torneo que se avecina, el Apertura 2021 de la Liga Deportiva del Oeste, que evidenciará a los que se afianzarán en los distintos puestos en cancha en este elenco y el estilo de Funes, que es la primera vez que comanda al Rojo. Será en este tiempo de competencia en donde se vislumbrará para qué está el Albirrojo, aunque, por los jugadores que le han quedado y por los nuevos que se han sumado, es muy probable que en la Liga con ancla en Junín serán protagonistas.

En ese orden, en relación a los jugadores del Rojo que habitan la plantilla de Funes, pueden mencionarse los casos de Gonzalo Morel, Facundo Blanco, Ulises Macías, Tomás González, Gonzalo García Borda, Guillermo Suárez, Matías Susi, Tomás Alsina y Rodrigo Crespo, con las vueltas al Alirrojo de Lucas Rea y Martín Ochoa, dos valores del club que son muy buenos deportistas.

En tanto, en relación a los que se han sumado como incorporaciones, ellos son Gerómino Astudillo, ex Agropecuario, que ocupa la posición de delantero; Ignacio Méndez, también ex Agropecuario, quien es defensor central; Tomás Torgano, ex Agropecuario, también central; Boris Soblevich, ex Agropecuario, arquero; Juan Andrade, ex Agropecuario, delantero; Nahuel Luna, proveniente del fútbol santafecino, delantero; y Daniel Salom, volante central proveniente del fútbol platense.

Todos estos deportistas, sumado a varios juveniles de la cantera del Rojo, son los que forman la plantilla de Primera, teniendo en cuenta que en el último tiempo, por decisión de los jugadores o porque se han incorporado a otras plantillas como refuerzo o por haber emigrado a inferiores del fútbol de Primera División o de clubes de ascenso, este club ha tenido varias bajas, como los casos de Baltazar Mallaina (presente en la Primera de la Academia Mascherano), Joaquín Susi (Primera de la Academia Mascherano), Pablo Moreyra (Primera de AFA de Douglas Haig de Pergamino), Salvador Dibastiani (Primera de la Academia Mascherano), Lucas Macías (Social de Ascensión), Juan José Sandoval (Primera de Sarmiento de General Villegas), Ignacio Iribarren (Quinta de Gimnasia y Esgrima de La Plata), Matías Riera (Primera de la Academia Mascherano), Emiliano Perujo (Primera de Once Tigres de Nueve de Julio), entre algunos otros.

Sin embargo, más allá de estas salidas, el Rojo se encuentran en etapa de renovación, intentando conformar un plantel con juveniles del club, con algunos experimentados albirrojos y con jóvenes incorporaciones casi todas conocidas por su nuevo DT, que tendrá la tarea de seguir manteniendo a esta entidad en los puestos de vanguardia de la Liga del Oeste y de prepararse por si aparece la posibilidad de jugar un torneo de ascenso, una circunstancia nublada, ambigua y llena de incertidumbre por todo lo que está pasando dentro del fútbol y la sociedad por la pandemia COVID-19, que, por lo que han afirmado las autoridades nacionales en el orden Estatal sanitario, ya ha entrado en la segunda ola, una circunstancia que podría afectar más a esta disciplina de lo que está.

LA PALABRA DEL TÉCNICO DIEGO FUNES

Ante este nuevo ciclo que comienza, y teniendo en cuenta que el nuevo director técnico de Rivadavia, Diego Funes, ya hace algunas semanas que está trabajando en el Rojo, Corazón Amateur le hizo algunas preguntas relacionadas a su estilo de trabajo, a cómo se ha sentido en este tiempo en la entidad a la que se ha incorporado y si las incorporaciones que ha sumado al Rojo tienen que ver con su pasado en Agropecuario como instructor.

En ese marco, en relación a cómo se ha sentido en su tiempo en Rivadavia, Funes expresó: “Me siento muy cómodo. Y estoy agradecido con la gente que me recibió, que me trata muy bien. Rivadavia de veía como un club grande desde afuera y lo es aun más desde adentro. Todos en esta entidad estas a disposición al 100%; hay un sentido de pertenencia muy grande”.

Tras ese concepto, consultado por qué lo había convencido para llegar al Rojo, Funes contó: “Rivadavia hace mucho tiempo que milita en torneos de ascenso. Y es un club muy ambicioso. Esas cosas son las que me trajeron hasta acá”.

Asimismo, sobre cómo definiría su estilo de juego, el instructor dijo: “Soy un técnico ofensivo, que busca siempre el protagonismo deportivo, y que los jugadores que dirijo traten bien el balón”.

Por su parte, en relación a si las nuevas incorporaciones de Rivadavia tienen que ver con su pasado como entrenador en Agropecuario, Funes aseveró: “Sin duda que tuvo algo que ver. Yo los conocía y sé que van a responder. Ellos son incorporaciones y no refuerzos. Son jugadores que van a pelear por sus puestos. Son jóvenes con mucho potencial y ganas de crecer. Conocen mi idea de juego y eso también me ayuda porque avanzamos más rápido”.

En esa misma línea agregó: “De todos modos, eso no les asegura la titularidad. Llegaron al club para crecer y ven esta oportunidad como una buena vidriera para crecer en lo individual o dentro del equipo. Por eso digo que tuvo que ver que los conocía. Hace tres o cuatro años que están entrenando a otro nivel, incluso varios de ellos hicieron pretemporada de Nacional B, así que saben de qué se trata todo esto. Aunque, como había mencionado antes, son incorporaciones y no refuerzos. Ellos son apuestas a futuro que pueden tener un buen presente o habrá que sostenerlos para que lo tengan más adelante. Ésa fue la idea a la hora de armar el plantel: no llenarnos de jugadores grandes de edad, con recorrido, que por ahí no se les puede exigir mucho porque, o vienen los domingos, o no pueden estar; o también tiene que ver la economía del club. Estos chicos vinieron a la pensión y si tenés jugadores grandes, a veces vienen con familia y tienen que ir a vivir a una casa. Todo eso nos llevó a armar este perfil de proyecto con jugadores jóvenes con proyección. Algunos de ellos van a tener un presente inmediato en el juego y otros van a tener que transitar un tiempo más de adaptación. Eso lo iremos viendo con la competencia”.