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Con el roberense Verón de titular, Santa Rita le ganó a Ingeniero y quedó a un paso de coronarse campeón del año

El “Lobo”, que tuvo una buena actuación en cancha del ex Atlético Roberts, superó de visitante 2 a 0 al Rojo, dentro de un partido que se jugó con mucha dinámica y vértigo. Ahora, en su estadio, los comandados por Paulo Tabasso intentarán mantener la ventaja para lograr ser los campeones anuales de la vecina Liga, como lo habían sido en el 2024.

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Santa Rita de Piedritas, con el roberense Nicolás Verón nuevamente de titular, jugó su primer partido de final del año ante Ingeniero White de Banderaló, y fue con la evidencia de un gran partido en cancha, el cual se lo quedó, en condición de visitante, por 2 a 0, victoria que lo dejó con claras ventajas para la revancha, en la que el “Lobo”, en su casa, intentará revalidar su éxito para levantar la última corona en juego del año, luego de haberse coronado ya en el Clausura y en el Reducido, y de haber salido subcampeón del Apertura, un puesto por debajo del propio Rojo, que, para estirar la final a una nueva serie, tendrá que ganar al menos por tres goles.

Tuvo el “Guante” Verón algunas claras chances de gol en este encuentro, aunque el que terminó convirtiendo para el cuadro piedritense, y por duplicado, fue Gastón Regis, la figura del encuentro, quien, con sus dos tantos, ambos de jugada, le dio a Santa Rita la posibildad de sellar una diferencia en el marcador muy buena, aunque enfrente tiene a una escuadra de gran categoría y tendrá que hacer muy bien las cosas en su reducto para poder, a la postre, quedarse con el cetro en juego.

Respecto a los detalles del partido, el local arrancó con decisión, ya que, antes de los cinco minutos, Eloy Roigé probó con un remate que se fue por arriba. Y, poco después, volvió a exigir con otro disparo desviado que terminó en córner tras haber pegado en un defensor. Ingeniero empujó a Santa Rita contra su arco, decidido a abrir el marcador.

La única baja del Rojo, la ausencia del expulsado Agustín Becerra, obligó a Guido Sacra a apostar por Bruno Barrera en el lateral derecho. Sin embargo, el equipo no perdió ímpetu ofensivo.

Santa Rita respondió con una gran jugada individual de Claudio Farías, que metió un pase profundo con el que encontró a Regis bien perfilado, pero el derechazo del ex Huracán de Carlos Tejedor se fue apenas desviado. El campo rápido, producto de las lluvias de los últimos días, aceleró todo.

A los 11 minutos llegó la primera jugada determinante: penal para Ingeniero, cobrado por un agarrón de Martín Schpether sobre Roigé. Los hinchas locales contuvieron la respiración mientras Nicolás Gamarra se posicionó para la ejecución desde los doce pasos. Lamentablemente para ellos, el remate del delantero se fue alto, por encima del travesaño. Alivio y llamado de atención para un Santa Rita, que rápidamente tomó nota de lo ocurrido.

El fútbol tiene sus crueldades y, a veces, no perdona: dos minutos después, en la primera llegada clara del “Lobo”, Regis aplicó todo su oficio. Recibió, se acomodó y sacó un derechazo cruzado formidable, imposible para Jonathan Puga. Del posible 1 a 0 local, al 1 a 0 visitante. El partido cambió de dueños en un abrir y cerrar de ojos, así como había sucedido siete días antes en el “Raúl Malbrán”, cuando Santa Rita, en la final del Reducido, le había ganado al Rojo por 4 a 0.

Ingeniero no se desmoronó, de hecho empujó y fue por el empate. El trámite del encuentro pareció ponerse de su lado cuando Alejo Ponzi recibió su segunda amarilla y dejó a Santa Rita con diez jugadores. Faltaba una eternidad.

Aun así, el “Lobo” mostró el carácter y el oficio que lo llevaron a dominar la temporada. Carlos Moyano y Schpether se multiplicaron en el fondo, cortando centros y rechazando cada envío aéreo. Martín Morillo, atento, tapó una doble chance clarísima entre Gamarra y Roigé que pudo haber cambiado la tarde.

El desgaste, el peso territorial y la lluvia hicieron todo cuesta arriba, pero Santa Rita resistió cada embate con uñas y dientes, mientras contraatacó cuando pudo con Mendoza y con Verón.

En el segundo tiempo, Ingeniero salió decidido, pero careció de contundencia. Intentó por afuera, por adentro, con centros y con remates desde lejos, pero siempre chocó con la muralla visitante.

Santa Rita tuvo la suya con Nicolás Verón, que definió ancho en una contra clarísima. El ritmo se volvió frenético, de ida y vuelta, con un terreno cada vez más pesado. La tensión escaló dentro y fuera del terreno de juego.

El “Lobo” piedritense sufrió otro duro revés anímico cuando Axel Romero, que había entrado para oxigenar la ofensiva, se lesionó a pocos minutos de su ingreso. Maximiliano Busto ocupó su lugar.

Ingeniero siguió y siguió, pero no encontró la solución a su principal problema: la puntería frente al arco. Creer o reventar. El equipo que tiene en su plantel a los dos máximos “artilleros” de la temporada, se quedó sin gol en el momento menos oportuno.

Posteriormente, un cabezazo de Nicolás Gamarra pasó muy cerca del palo derecho de Morillo. No era su tarde, ni tampoco la de Roigé. Los goleadores no tuvieron respuesta ante la férrea defensa piedritense.

Cuando el reparto de fuerzas parecía sellado, cuando el Rojo estaba jugado al ataque, llegó el mazazo final. En tiempo de descuento, otra vez Gastón Regis apareció para sentenciar la historia. Control, definición y estallido visitante. 2 a 0, silbidos de angustia en la tribuna local y la sensación de que el título ya tiene dueño.

La segunda conquista de Regis cayó como un baldazo de agua helada sobre un Ingeniero que vio cómo el margen de pelea se achicó dramáticamente.

Ahora Santa Rita quedó a un paso del bicampeonato. Incluso, si pierde por dos goles en el partido revancha, igualmente será campeón debido a la ventaja deportiva. Para estirar la definición, Ingeniero necesita un triunfo por tres goles o más, un panorama muy complejo ante un rival sólido, experimentado y que parece hecho para los partidos grandes.

En Banderaló, bajo un cielo que no dio tregua, Santa Rita volvió a demostrar por qué es el equipo del momento. Con jerarquía, oficio y un Regis intratable, el “Lobo” acaricia un nuevo campeonato.

Fuente de crónica: diario Actualidad de Villegas.

Foto: prensa Tribuna Azul.

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