La Selección Argentina U-17 masculina de básquet quedó muy cerca de lograr el título del Campeonato Sudamericano de la categoría. En Paraguay, el equipo nacional dirigido por Mauro Polla, que tuvo entre sus protagonistas en todo el torneo al linqueño Benjamín Pettovello, perdió la final en el clásico con Brasil por 98-77, por lo que terminó siendo subcampeón, y con una sola derrota en su haber en cinco cotejos.
En ese marco, Argentina, más allá de no haber podido quedarse con el cetro en juego, logró en el certamen el objetivo principal, dado que se quedó con uno de los tres pasajes a la AmeriCup U-18 que se desarrollará en el 2026.
Asimismo, en relación a la performance de Benjamín -en el presente jugador del Montova de Italia- en el choque definitivo de contienda, ingresó de titular y estuvo en cancha casi 22 minutos, con el aporte de 5 puntos y 7 rebotes, cuando, en los partidos anteriores, respecto a las unidades cosechadas para su cuenta personal, había encestado 13 en el primero, ante Uruguay; 8 en el segundo, frente Ecuador; 5 en el tercero, versus Colombia; y 15 ante Venezuela en la semifinal, en la que había sido figura central de su equipo y frente al que, además, había aportado 8 rebotes. Asimismo, como dato distinguido, el oriundo de nuestro medio terminó siendo, en la premiación definitiva de campeonato, elegido dentro del quinteto ideal del torneo.
Sobre los detalles del encuentro ante Brasil, Argentina pegó primero en una final de alto voltaje y buen ritmo. De la mano de su perímetro logró una ventaja de cuatro que duró poco. De inmediato, Brasil metió un parcial de 14-0 y lo dio vuelta para cerrar arriba el primer cuarto 25-17. En el segundo, el juego comenzó a ponerse cuesta arriba. Brasil siguió efectivo de larga distancia y Argentina no encontró caminos en ataque para responder. La defensa del elenco nacional no pudo contener los embates de un rival que metió otro parcial de alto goleo y sacó veinte de cara al entretiempo (31-51).
A la vuelta de los vestuarios, Brasil mantuvo su intensidad defensiva sacando de ritmo y de ángulos al seleccionado. Por eso, la máxima llegó a 24 en el comienzo del tercer período. Pero, a partir de ahí, Argentina metió un parcial de 12-0 que, luego, se convirtió en 16-2, para ponerse a diez. El envión se produjo con efectividad en los lanzamientos y agresividad defensiva que provocó goles de ataque rápido. Pero, en los dos minutos finales, Brasil metió su propia ráfaga de 9-0 y recuperó una ventaja tranquilizadora de cara al cierre (70-51).
Argentina arrancó el último capítulo corriendo. Así pudo descontar y ganar en optimismo. Pero Brasil no tardó en ajustar en ataque y manejar los tiempos. La ventaja fue demasiado grande para lograr una nueva remontada y el rival fue preciso en momentos oportunos para poner cifras definitivas y quedarse con el título.
Joaquín Caumo fue el goleador del equipo, con 23 puntos, acompañado por los 13 con siete rebotes de Santiago Pettinaroli y las 12 unidades de Bautista Gobetti. Argentina tuvo una jornada irregular en sus lanzamientos, con 31% en triples y 14/27 en triples.
No obstante, fue un meritorio segundo puesto para la camada 2008 en su primera competencia oficial vistiendo la camiseta nacional. Llegó invicto a la última jornada, consiguió uno de los tres boletos para la AmeriCup U-18 de 2026 y se aseguró un año más de trabajo con roce internacional. Volverá al país con un grupo consolidado y un norte definido para trabajar de cara al próximo desafío.
Previo a este duelo de finalísima, el combinado nacional había superado sucesivamente a Uruguay (93 a 58), Ecuador (126 a 43), Colombia (78 a 69) y Venezuela (66 a 45).
Fotos: Fiba.
