El Linqueño se coronó en el torneo 2022 de la Federación Bonaerense Pampeana
Le ganó hoy 2 a 1 a Embajadores de Olavarría en Tandil, luego de haber evidenciado un gran partido, ante un buen rival que había comenzado ganando, aunque el “León” sentenció dos goles en el complemento y levantó la copa en lo alto. Así, terminó con la evidencia de una exima campaña, con nueve victorias consecutivas, con 25 goles a favor y solo 4 en contra.
El Linqueño, hoy por la tarde, en la final del torneo 2022 de la Federación Bonaerense Pampeana, tras haber ganado la Subzona Norte, se midió con el ganador de la Subzona Sur, Embajadores de Olavarría, en busca ambos equipos de quedarse con el título de este atractivo certamen, que otorgó a estos dos elencos una plaza al Regional Amateur 2022, aunque hoy se debatían la corona central de la competencia.
Los dos llegaban bien a este cotejo de campeonato muy bien, con ocho partidos ganado consecutivos de CAEL y con siete victorias, dos empates y una derrota para el CEO.
De ese modo, estos dos elencos comenzaron a jugar una atrapante final en Tandil, en el estadio de San Martín, terreno neutro, en el marco de una final que se iba a definir a un solo cotejo, que comenzó con Embajadores usando más la banda derecha, intentando generar peligro por allí, aunque con el CAEL también intentando generar peligro por su banda derecha, con Sebastián Pajón como protagonista. Y por el medio, con Gabriel Serrano y Gabriel Velázquez como protagonistas.
En ese marco, en los primeros minutos, el “León” llegó con dos acciones de aproximación, una con un centro de Pajón que pudo descolgar bien el portero de Embajadores, Gonzalo Rizzi. Y otra con un remate de media distancia de Serrano que detuvo también el portero del Verde y Blanco.
Era de ida y vuelta el encuentro en los primeros 10’, con dos elencos intentando generar peligro, y fue en ese minuto en el que el Albiazul generó la más clara con un disparo de media distancia de Javier Molina que pudo despejar al córner el portero olavarriense.
Luego, a los 12, el CAEL generó peligro con un pase filtrado de Juan Ignacio Coria que terminó con un remate de Velázquez que se fue apenas arriba del travesaño.
En 15’ era más el “León”. Y ya había tenido algunas jugadas de gol. Le faltaba la puntada final para abrir el marcador.
En esa sintonía de partido, en el cuarto de hora Pajón metió un gran centro por derecha que por centímetros no puso tomar el centrodelantero Hernán Brylko adentro del área, sino hubiese terminado en el fondo de la red.
Estaba confundido el elenco de Olavarría ante los arrestos y el juego asociado de El Linqueño, que metía presión, tenía la tenencia de la pelota y gestaba acciones de creación incisivas en ofensiva, además de juego asociado.
Sin embargo, a los 17’, Embajadores llegó con una buena acción mediante un adelanto de Rojas, un buen pase hacia la izquierda y un remate de Moro que se fue apenas arriba del travesaño. Había sido, hasta allí, la única jugada que había tenido el CEO.
Tras esa acción, el cotejo entró en un bache futbolístico entre marcas y falta de creación. Sin embargo, a los 36’, el elenco olavarriense casi convierte tras un centro por derecha rasante que no pudo tomarla uno de sus delanteros a metro de la línea por un despeje oportuno del lateral izquierdo Lautaro Borao.
En tanto, unos segundos después, tras un centro por derecha y otro desde la izquierda a continuación, el árbitro del partido cobró penal por una mano del zaguero central Franco Barisone. Y, puntualmente, a los 39’, el que cambió nítida chance por gol, con un buen remate fuerte y al medio, fue el capitán Juan Álvarez.
Era injusta la ventaja para el Verde y Blanco. Había sido más el CAEL en casi todo el primer tiempo y no se merecía estar abajo en el marcador. Sin embargo, el fútbol tiene estas cosas y, por eso, siempre es tan atractivo e impredecible.
De todos modos, es oportuno destacar que el León había sido más que su rival hasta los 30, momento en el que Embajadores había emparejado las cosas, sobre todos con algunas llegadas y con mayor posición del balón del que había podido tener hasta esa primera media hora de cotejo.
De ese modo terminó un interesante primer período, en el que, como se había mencionado, había sido más El Linqueño, aunque siempre en el marco de un choque bastante parejo y peleado, con llegadas de peligro para ambos elencos, y con un acierto del CEO que le estaba dando la ventaja en el marcador.
COMPLEMENTO
El segundo tiempo comenzó con los dos elencos presionando alto, tratando de no ceder terreno. Y con un remate de Serrano de media distancia a los 8’ que se lo quedó Rizzi.
Asimismo -de tanto ir e intentar-, a los 18’, el CAEL llegó al empate con un desborde magistral por derecha de Pajón, un centro del “7” y un cabezazo preciso de Hernán Brylko sobre el que nada pudo hacer el bueno de Rizzi.
Era justa la igualdad para los comandados por “Maxi” Antonelli. En tanto, tras la conversión linqueñista, Embajadores tuvo dos claritas para convertir, aunque no pudo en la puntada final, en la definición. La última de las dos, nítida, tras un centro desde la derecha y una definición en el área chica de Rojas que se fue desviada por poco.
En ese marco de juego, el CAEL casi sentencia en la red tras un buen centro para el ingresado Mauricio Pavón Zárate desde la derecha que terminó con un remate furibundo del delantero que se fue apenas arriba del travesaño.
Asimismo, a los 27’, tras un córner al segundo palo desde la izquierda, el “León” materializó el segundo tanto con un cabezazo adentro del área de Serrano que se metió de lleno en el arco cuidado por Rizzi. Era justa la victoria linqueñista por todo lo que había hecho en el partido.
Asimismo, tras su segunda conversión, El Linqueño siguió intentando, y con algunas sustituciones que le dieron resultado para mantener la intensidad en las marcas y en la zona de ataque, con dos llegadas de aproximación que sumaban para su buena actuación colectiva en todo el cotejo, especialmente en los primeros 30’ del primer tiempo y en todo el complemento. Por su parte, su rival, en el resto de tiempo que le quedaba al cotejo, buscó encontrar el empate, aunque no de manera clara, con chances nítidas de gol, con un CAEL, en ese contexto de juego, aplomado y seguro en la marca, con pases cortos de tenencia del balón y con arrestos de contraataque cuando podía generarlos, fiel al estilo del CAEL cuando tiene las acciones dominadas.
De ese modo concluyó el partido, con El Linqueño siendo un gran campeón, con nueve triunfos consecutivos, con 25 goles a favor y solo cuatro en contra, con una faena en su campaña de alto vuelo, con buenas actuaciones siempre, una circunstancia global deportiva que evidencia al Albiazul como un gran equipo.
SÍNTESIS DEL PARTIDO
El Linqueño 2: Adrián Azcona, Franco Barisone, Lautaro Borao, Matías Badano, Juan Ignacio Coria, Elías Martínez, Sebastián Pajón, Gabriel Velázquez, Hernán Brylco, Sebastián Serrano y Javier Molina. Suplentes: Facundo Gómez, Juan Martín Lora, Jonathan Simón, Alejo Porcel, Bautista Colombi, Mauricio Pavón Zárate y Lucas Ciotti. DT. Maximiliano Antonelli- Diego Castaño.
Embajadores Olavarría 1: Gonzalo Rizzi, Bruno Di Bello, Facundo Wiechniak, Franco Carlucci, Nahuel Moro, Nicolás Lareu, Juan Areco, Emilio Scipioni, Braian Bertolotti, Juan Álvarez y Luciano Rojas. Suplentes: Renzo Cuatriocho, Joaquín Llamas, Santino Sacchi, Lautaro Sasali y Diego Barzola. DT: Miguel Diorio.
Goles: PT: 39’, Juan Álvarez (EO); ST, 18’, Hernán Brylko (EL) y 27’, Gabriel Serrano (EL).
Cambios: ST: 17’, Pavón Zárate por Javier Molina (EL); 28’, Bautista Colombi por Gabriel Velázquez; 32’, Renzo Cuatriocho por Braian Bartolotti y Joaquín Llamas por Juan Álvarez (EO); 37’, Santino Sacchi por Bruno Di Bello (EO): 41’, Lucas Ciotti por Sebastián Pajón (EL); 42’, Lautaro Sasali por Nahuel Moro y Barzola por Scipioni (EO).
Árbitro: Fernando Zabalza.
Asistente 1: Santiago Alvarez.
Asistente 2: Lautaro Paletta.
Cuarto árbitro: Camila Barsotini.