Liga del Oeste: tras once victorias consecutivas, Rivadavia se consagró campeón del Apertura 2022

Rivadavia tenía hoy por la tarde la chance de coronarse campeón del torneo Apertura 2022 de la Liga Deportiva del Oeste, y eso podía suceder si le ganaba a River Plate en el “Coliseo”, ante su gente, o si empataba o perdía su inmediato perseguidor, Villa Belgrano ante, Sarmiento, y si no sentenciaba un buen resultado Independiente frente a BAP.

Era mucho el entusiasmo que había en el Rojo antes de que comenzara este partido, que, en la previa, evidenciaba al local con diez partidos consecutivos ganados, con uno solo perdido en el torneo, con la muestra de un gran fútbol en sus cotejos jugados, y con la evidencia también de un plantel sólido y unido, ganador en su espíritu, convencido de lo que puede dar en el terreno de juego.

Del otro lado, su rival de turno era “La Loba”, que llegaba al “Coliseo” con 17 puntos en su haber, con una campaña también de buena faena, aunque 13 puntos abajo del Rojo, una diferencia, al menos en lo matemático, que mostraba la distancia de jerarquía de ambos equipos en este torneo, aunque el Rojo, de frente, hoy tenía que medirse con un rival peligroso, debía dar un paso más ante un elenco que podía complicarle la tarde, con Villa acechando desde atrás, con 23 puntos en su haber, teniendo que enfrentarse con Sarmiento, que también llegaba a esta jornada con 17 unidades. Y con Independiente también con posibilidades de campeonar, con 22 puntos, teniendo que medirse hoy con BAP.

Así, de ese modo, estaba el a priori del cotejo en Rivadavia, que comenzó con el local más dinámico, buscando empezar a imponer su jugo por abajo, usando las bandas, aunque con varias imprecisiones por parte de ambos elencos. De todos modos, a los 4’, River fue el primero en llegar con un remate de Jerónimo Cabral directo hacia el arco que se lo quedó Boris Sablevich.

Tras esa acción, el Rojo comenzó a “bombardear” a su contrincante con centros y jugadas de aproximación peligrosas adentro del área. En ese marco, a los 23’, en una jugada rápida y una salida lejos del portero visitante, el Albirrojo casi llega al primero con un remate en esa acción de Tomás González que pegó en el palo y que pudo, con desesperación, sacar en la línea uno de sus defensores.

Estaba jugando bien el Rojo, concentrado y encontrando su estilo de juego de presión y dominio de balón, aunque en una cancha que no estaba en buenas condiciones luego de haber sido resembrada, y ante un rival que luchaba para que no lo dominaran y lo metieran en su campo, aunque no lo estaba logrando. De todas maneras, cerca de los 40’ minutos, pocas habían sido las acciones de riesgo real para los dos elencos, a no ser la generada por “Tomi” González.

Así, con ese perfil, con el Rojo teniendo la tenencia del balón e intentando la apertura del marcador más que su contrincante, aunque con pocas acciones de riesgo para ambos elencos, concluyó el primer período.

COMPLEMENTO

En tanto, el segundo tiempo comenzó con el Rojo nuevamente dinámico, metiendo presión, con la firme decisión de encontrar la victoria. Y en los primeros minutos gestó algunas maniobras de aproximación con disparos de media distancia. De todos modos necesitaba encontrar mayor profundidad y acciones elucubradas, asociadas, para romper el cerrojo de River, que estaba abroquelado en su cancha, intentando generar alguna situación de peligro de contrataque.

En esa sincronía de partido, los 27’, tras una buena acción colectiva que concluyó en los pies de Ramiro Barisoni, el delantero recibió una falta adentro del área, por lo que el árbitro del partido, Oscar Bono, cobró penal. Y el que lo cambió por gol fue el bueno de Servando Gñasso, quien, con pericia, coló la pelota al palo izquierdo del portero visitante, para desatar la alegría de todos los hinchas albirrojos, quienes festejaron el tanto con gran euforia.

Tras la conversión, sabiendo que se estaba coronando, el Rojo comenzó a cuidar más el balón y a cerrar sus líneas en el fondo y en el medio. Abroquelado el local, cuidaba el 1 a 0 a favor. En ese marco de juego, a los 34’, Rivadavia se quedó sin un jugador por una falta de “Leo” Cuomo a Tomás Ferro que concluyó en la expulsión (roja directa) del “10” albirrojo.

Había que aguantar ahora con diez en la cancha y con “La Loba” buscando desesperado el empate. En ese marco de juego, a los 37’, en una acción de peligro del visitante, el portero Sablebich, en el despeje de esa maniobra, sufrió un fuerte golpe en su caída que asustó a todo el estadio, con una inmediata atención que concluyó con la recuperación del gran guardapalos del local.

Quedaban 6 minutos y Rivadavia tenía que sostener la ventaja si quería quedarse con el campeonato. En ese marco de juego, concluido el tiempo, adicionaron 7’ más. Y, en ese período, el Rojo, en una contra rápida, casi llega al segundo con un remate del ingresado Samuel Sosa que se fue cerca del arco cuidado por Giuliano Lizzadro. De todos modos, “La Loba” seguía buscando el empate con desesperación, pero con el Albirrojo defendiendo sólido y accionando de contrataques rápidos.

Y con esa sincronía de juego concluyó el cotejo, que dejó al Rojo campeón, en el marco de un choque en el que Rivadavia se mereció la victoria, y también este título, y eso fue porque consiguió once victorias consecutivas, con la evidencia en este campeonato de un gran juego, sólido, asociado, con un estilo propio, de jerarquía y orden, de creatividad y gran faena en la zona de ataque.

Es Rivadavia justo campeón de este certamen.

LA CAMPAÑA DE RIVADAVIA CAMINO HACIA EL TÍTULO

Rivadavia, para llegar a este nuevo cetro, realizó una gran campaña, con una sola derrota hasta haber logrado la corona. En ese sentido, en la primera fecha cayó 2 a 0  con Mariano Moreno, en la dos derrotó 3 a 0 a Defensa Argentina; en la tres, 3 a 1 a su homónimo de Junín; en la cuatro, 2 a 0 a Jorge Newbery; en la cinco, 2 a 1 a Ambos Mundos; en la seis, 3 a 2 a Origone; en la siete, 3 a 1 a BAP; en la ocho, 4 a 1 a Villa Belgrano; en la nueve quedó libre; en la diez venció a Deportivo Baigorrita 2 a 0; en la once, 3 a 0 a la Academia Javier Mascherano; en la doce, 1 a 0 a La Favela; y en la trece,

En tanto, tras haber evidenciado esta gran cosecha, logró reunir 30 puntos, cuando su inmediato perseguidor, Villa Belgrano, ostenta 23, y esa diferencia es la que le permitió a Rivadavia tener la chance de este fin de semana salir campeón, cuando aún faltan dos fechas para que concluya el certamen, en las que se tendrá que medir con Sarmiento e Independiente.

EL ÚLTIMO TÍTULO ALCANZADO POR RIVADAVIA

Vale destacar que Rivadavia había salido campeón por última vez en el Apertura 2019. Y había sido en el torneo denominado Andrés pato Pastorino”, con la copa en juego “Clínica Imec”, luego de haber empatado en ese partido de gloria ante su homónimo de Junín 0 a 0. En ese torneo habían dirigido a Rivadavia algunas fechas, primero, Fabio Schiavi y, luego, Matías Bardón. Y ese cetro, en número diecinueve dentro de la vecina Liga Juninense, había servido al Rojo para clasificarse al Regional Amateur. En ese certamen, “Riva” había conseguido 26 puntos en los doce partidos jugados, logrando ocho victorias, dos empates y dos derrotas, con veintiséis goles convertidos y nueve en contra.

La formación que había presentado el Rojo para esa jornada definitiva había sido, en su once inicial, la siguiente: Bruno Bellón, Gonzalo Morel, Pablo Moreyra, Martín Ochoa, Matías Susi, Maxi Gómez, Pablo Labbate, Lucas Macias, Gonzalo García Borda, Salvador Dibastiani y Facundo Blanco. Los suplentes habían sido Facundo Gómez, Elías Colman, Ignacio Iribarren, Tomás Alonso, Servando Gñasso, Tomás Uvilla y Gaspar Muñoz.

ENFRENTAMIENTOS DE LA DECIMOCUARTA FECHA

Sarmiento vs. Rivadavia (L)

La Favela vs. A.J. Mascherano

Rivadavia (J) vs. Ambos Mundos

Defensa vs. Origone FC

Moreno vs. BAP

Independiente vs. V. Belgrano

River vs. Deportivo Baigorrita

Libre: Jorge Newbery.

SÍNTESIS DE PARTIDO

Rivadavia 1: Boris Sablevich, Martín Ochoa, Lucas Macías (c), Mateo Scheffer, Rodrigo Crespo, Pablo Moreyra, Servando Gñasso, Julián Campestrini, Ramiro Barisoni, Leandro Cuomo y Tomás González. Suplentes: Facundo Gómez, Gastón París, Salvador Dibastiani, Samuel Sosa, Renato Herrera Facundo Ilescas y Blas Domínguez. DT: Diego Funes.

River 0: Giuliano Lizzadro, Jerónimo Cabral, Melián Repetti, Brian Carpio, Jonhy Aquino (c), Emanuel Crego, Tomás Ferro, Bernardo Rovelli, Renzo Palermo, Jorge Abdala y Santiago Núñez. Suplentes: Enzo Espíndola, Santiago De Luca, Roberto Pecollo, Lautaro Martín, Gustavo Benítez y Antonio Cosentino. DT: Diego Martino.

Goles: ST: 27’, Servando Gñasso (RL).

Cambios: ST: 16’, Blas Domínguez por Julián Campestrini (RL); 32’, Samuel Sosa por Ramiro Barisoni (RL); 44’, Emamuel Crego por Gustavo Benítez (RP); 49’, Gastón París por Servando Gñasso (RL).

Árbitro: Oscar Bono.

Líneas: Leonardo Vásquez y Franco Moreno.

Estadio: “Coliseo” (Rivadavia).

Foto: gentileza de Juana Zambianchi.