La linqueña Romina Cañón, en los planos altos del hockey nacional

La entrenadora oriunda de nuestra ciudad logró todos los objetivos que se había trazado para el 2019, entre ellos, el de hacer evolucionar a los equipos que comanda en el Club San Luis dentro de la Asociación de Hockey de Buenos Aires, una de las más prestigiosas del país. Además, como coaching, junto a Marcelo Garrafo, lograron sostener en la categoría A del Metropolitano al elenco mayor masculino de Santa Bárbara.

La linqueña Romina Cañón es, sin dudas, una distinguida en el comando de las divisionales de alto vuelo de nuestro país dentro de la disciplina del hockey, tanto femenino como masculino. En ese sentido, con equipos del Club San Luis a su cargo, como el B de mujeres y la Quinta femenina, ha logrado todos los objetivos que se había trazado en este 2019. Además, como ayudante dentro de la escuadra A, también materializó con todo el cuerpo técnico el postulado que se habían tramado en lo deportivo.

Asimismo, Cañón, quien también había sido una gran jugadora en esta disciplina, con su inicio en el Club Atlético El Linqueño de Lincoln, y con incursiones en elencos como River Plate, como coaching en el Club Santa Bárbara, con el equipo A de caballeros, que juega en la categoría A del Metropolitano de la Asociación de Hockey de Buenos Aires, una de las más prestigiosas de la Argentina, junto a Marcelo Garrafo, pudieron conseguir el objetivo que se habían propuesto, el de sostener la categoría, dentro de una divisional que es aguerrida y muy peleada en sus contiendas.

Aunque vayamos a los detalles de éxitos logrados por Cañón el pasado año. En el 2019, Romina trabajó durante todo el año, como entrenadora de hockey en el Club San Luis, luego de su labor realizada en el 2018 en esta institución, la cual había dejado muy conformes a sus dirigentes, motivo por el cual le propusieron continuar con su lugar de ayudante en el equipo A mayores (con el cual ya habían ascendido a la categoría D) y que estuviera a cargo, además, del equipo B, tanto en mayores como en quinta (la última categoría de menores).

En ese marco, Con el equipo A, el objetivo que se había trazado el cuerpo técnico era volver a ascender, y sabían que estaban apostando a algo grande, aunque, sin titubeos, se arrojaron hacia la osadía. En ese sentido, el elenco de San Luis jugó veintiséis partidos, con una cosecha de dieciocho victorias, tres empates y cinco derrotas, un increíble score que lo posicionó en el segundo lugar, por lo que, como lo habían planeado, abrocharon el ascenso nuevamente a la divisional C de la Asociación de Hockey de Buenos Aires, un logro que, por sus características jerarquía, fue uno de los más importantes para este club en todo el año.

Asimismo, con el equipo B, liderado por Romina, el objetivo que tenía la linqueña era sostener la categoría, ya que estaban arrancando una etapa de formación con su equipo, por lo que la labor pasaba por transformar a esa escuadra para que sea protagonista y se posicionara en la divisional.

En ese contexto de expectativa, el cuadro B de San Luis jugó veinticuatro partidos, con la obtención de trece victorias, ocho empates y sólo tres derrotas, y con las escuadras que, a la postre, iban a lograr el ansiado ascenso. De todos modos, a falta de seis fechas para que concluya el certamen de la Asociación de Hockey de Buenos Aires, la escuadra comandada por Cañón alcanzó el objetivo de mantener la categoría y, además, terminó en el dignísimo cuarto lugar.

Segundo éxito deportivo para Cañón, quien, consultada por “Corazón Amateur” por las performances que había sentenciado, declaró: “Fue un año sumamente positivo, de muchísimo crecimiento, durante el cual se lograron todos los objetivos planteados”.

Junto a todos estos logros, durante el 2019, Romina trabajó como coaching en el Club Santa Bárbara, con el equipo A de caballeros, que juega en la categoría A del Metropolitano perteneciente a la Asociación de Hockey de Buenos Aires. En ese contexto, junto a Marcelo Garrafo, comenzaron a trabajar con ese elenco a falta de seis fechas para la finalización del torneo, instancia en la que se estaba intentando no perder la categoría y, cuando restaban tres jornadas para la definición de la contienda, ya habían logrado el objetivo de sostener la divisional.

Todos estos logros de jerarquía dentro del hockey de primera línea del país, han puesto a Cañón, como había sido en el 2018, en un lugar destacado dentro de este deporte, una arista que, sin dudas, enorgullece a nuestro Distrito, que merece conocer estas noticias emocionantes, rasgadas de taleto, sacrificio y éxitos de alto vuelo.

ALGUNOS DATOS QUE DENOTAN EL PRESTIGIO DE CAÑÓN

Romina Cañón Moral nació en la ciudad de Lincoln, el 23 de enero del año 1982. Desde muy pequeña le gustaba jugar al fútbol y al hockey. Y lo hacía con muchas ganas y pasión. Su amor por esos dos deportes y su talento natural la llevaron, en primera medida, luego de haber pasado su infancia y adolescencia en Lincoln, a jugar en la Primera de River Plate, lugar al que pudo arribar mediante una prueba que le habían realizado previamente en la entidad “millonaria”. Tras ese interesante paso por Buenos Aires, se metió de lleno en el hockey de alto vuelo, y durante mucho tiempo, mostró sus cualidades en el Club Universitario de La Plata, y no sólo como jugadora, sino, luego, como entrenadora.

En ese contexto, en detalle, tras haber llegado a esa entidad, con el tiempo, y por su talento, logró en lo deportivo ganarse un puesto en el equipo de Primera B de ese club y hasta llegó a ser capitana. Además, en esa misma entidad, luego de su carrera como jugadora, ya contratada como instructora (trabajó, en total, doce años entre las conducciones de Primera y categorías inferiores), puedo hacer retornar a ese conjunto a la divisional donde estaba, debido a que habían descendido, un gran éxito que le permitió acrecentar sus aspiraciones como técnica. Producto de ese logro, la convocaron en el 2017 desde el Club Estudiantes de La Plata (ya había estado en esa institución en el 2015 como ayudante de entrenador) para que comandara la Primera División masculina, que milita en la B del torneo Metropolitano, un campeonato muy prestigioso que pertenece a la Asociación de Hockey de Buenos Aires, la más importante del país.

En ese sentido, Cañón no sólo logró asentarse en ese puesto con creces en ese primer año, ya que había podido en el último torneo duplicar los puntos que habían hecho en el anterior (2016), sino que, luego, materializó en la primera parte del 2018, de estar entre los primeros puestos de este certamen, tarea que sólo se pueden poner como objetivo los mejores equipos de esta competencia.

Asimismo es digno destacar que Romina es la única entrenadora dentro del hockey masculino en la Asociación de Hockey de Buenos Aires, y eso se debe a sus grandes cualidades, las cuales ha sabido evidenciar a lo largo de su carrera como instructora. Además ha hecho el curso de Coach Ontológico, lo que le permite aplicar en sus conjuntos un trabajo complementario en el aspecto psicológico y grupal.