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Sube

Con su humildad de siempre, colorado su rostro por el sol caliente entremezclado en los duros entrenamientos, Tomás Uvilla sube. ¿Pero a dónde sube Tomás? Sube en sus convicciones, en el avance de su carrera como deportista, la que arrancó con puro amor desde bien chiquito en el Club Rivadavia.

Es que, en Villa San Carlos, donde brilla en la Cuarta División, hace apenas unos días, luego de haberse tragado ese sol demoledor en varias prácticas en su categoría, fue convocado para participar en los entrenamientos de la Primera, puntualmente cuando esta divisional hace fútbol. Sí, en la Primera División de Villa San Carlos, que milita en la B Metropolitana. En ese marco, en esa instancia deportiva especial, el joven rivadaviense hizo una gran tarea acorde a lo que él pretende: siempre ser protagonista por mas que juegue donde juegue. Su confianza es demoledora.

Además, el ex rivadaviense jugó un amistoso con la Cuarta División y, gracias a su potencia y seguridad, metió el primer gol, en el marco de un cotejo que Villa terminó ganando 3 a 1.

En relación a la Primera, que es sin dudas la noticia que convoca esta nota, Uvilla, por órdenes del director técnico de esa categoría, será llamado cada vez que hagan entrenamientos de fútbol, lo que le permitirá no sólo entusiasmarse en sus pretensiones de llegar a lo más alto del fútbol de esta entidad, sino también en tener la chance de fogonearse con jugadores de un gran nivel, lo que alienta y empuja con velocidad el péndulo que transita, que, como se observa, siempre está en lo alto.

Es increíble ver cómo uno de nuestros jóvenes futbolistas, a quien vimos criarse desde chiquito en uno de nuestros clubes, saca una fuerza superior para llegar a sus cometidos. Todo un ejemplo de superación es Uvilla, y por eso, desde “Corazón Amateur” lo seguimos bien de cerca, acompañando su carrera y aprendiendo de él al observar cómo, una a una, el juvenil categoría 2000 va superando sus metas y el tramado de sus osadías.

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