Un niño de Argentino agradeció llorando por lo que le dan en el club, en una escena que quedó registrada en un video

Sucedió en la cena de cierre de año del Club Atlético Argentino de Lincoln, en donde se presentó parte de la obra de la sede social que están construyendo en la entidad, la nueva reina que representará al “Fortín” en el Carnaval, en la cual también se entregaron trofeos a los integrantes de la Escuelita de fútbol. En ese marco, uno de esos niños, Tahiel Carrascal, tomó el micrófono y, llorando de emoción, agradeció a los profesores e integrantes del club por todo lo que le dan en los momentos que va a la entidad a hacer deporte.

Vale la pena mencionar y publicar esta nota porque en casi todos los clubes de Lincoln, no sólo se otorga la formación a los niños con gran vocación y cariño, sino que, además, en lo que es un gesto de abnegación mayor, actúan como entidades de contención, ya que en cada uno de ellos, El Linqueño, Juventud Unida y Argentino, funcionan merenderos, en los que se les da a los pequeños que asisten allí la merienda y , en algunas oportunidades, la comida. Asimismo, siempre articulan actividades de inclusión por fuera del deporte de rigor o competencia, lo que genera otro momento de felicidad para los chicos, que ven en estos espacios una segunda casa. En este caso, la lucidez de un pequeño y su valor han representado el pensamiento y el apego con amor que los niños sienten en estos clubes de gran calidad humana. Desde “Corazón amateur” respetamos y admiramos estas posturas de compromiso social y ético.